La mayoría de estas canciones aparecieron ya en forma maximalista en el aclamado cuarto álbum del año pasado, pero las versiones simplificadas en esta ocasión revelan su verdadero poder. En bruto, las letras de Olsen se exponen para alcanzar nuevas alturas.
Por Valentina Morales
La mayoría de los artistas se guardan sus demos para sí mismos, sacándolos al aire solo cuando alguien en el sello les sugiere que los pongan en un box set para celebrar algo. Sin embargo, Angel Olsen no es como la mayoría de los artistas. Hace un tiempo, se escapó a un pequeño estudio en la naturaleza para trabajar sola en un montón de canciones nuevas, acompañada solo por su guitarra y el ocasional trino de un órgano. Crudo y revelador, el material se basó en una ruptura aún reciente y encontró a Olsen en un estado profundamente vulnerable. Fue esto lo que marcó los cimientos del exitoso cuarto álbum de la cantante, All Mirrors, estrenado el año pasado, que vio a la compositora construyendo sobre esas canciones con una sinfónica arrolladora, creando un álbum dramático de noir moderno que obtuvo sus mejores críticas hasta el momento. Llegando a las listas de los mejores álbumes de 2019, incluida la de Sunderbeats.
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Si All Mirrors nos llevó a un salón de baile lujoso y chirriante donde todos éramos parte del lujoso y cargado sonido, entonces Whole New Mess nos esconde en la intimidad del hogar de Olsen. Acompañada de la simplicidad de una guitarra y la voz (con mucho reverb, hay que decirlo) entramos en este mundo mucho más personal enmarcado en una estética lo-fi, altamente contrastante con All Mirrors, cuyo sonido hiper producido (en el mejor de los sentidos) no dejaba espacio para detenerse a respirar. Olsen siempre había planeado lanzar las grabaciones originales de las canciones de All Mirrors, pero quería que las versiones más atrevidas y fuertes llegaran primero a sus fans.
Whole New Mess es el sonido puro de Olsen, no solo mostrando su alma, sino que dando esos primeros pasos para descubrir cómo sentirse mejor. El sonido en general y el contenido lírico de Whole New Mess nos evoca un poco el calor de verano, casi ambientado en el sur de Estados Unidos - imagínense esos clásicos porches en las entradas de las casas mientras las personas se balancean en las mecedoras, abanicándose para capear el calor- una estética sonora pesada en su simpleza y cruda en sus letras que nos entregan absoluta honestidad.
Áspera y poco pulida, “(We Are All Mirrors)” exuda una frialdad nítida que se presenta como una balada primitiva y dolorosa, Olsen medio llorando, entrega las devastadoras líneas iniciales de la canción: “I’ve been watching all of my past repeating / There’s no ending.” Por su parte “Lark Song” encuentra a Angel Olsen abriéndose camino a través de la desesperación, agarrándose a las brasas de una relación que sabes que te quemará, pero que no puedes evitar alcanzar de todos modos.
Si bien todas estas historias ya las conocíamos en All Mirrors, en Whole New Mess adquieren un nuevo sabor, quizás aún más doloroso y dañado que el año pasado. "(Summer Song)" es aún más cruda, despojada de todo arreglo innecesario, ya que Olsen cuya voz suele ser un mazazo fuerte, tirita exclamando: “I lost my soul / Was just a shell”.
Whole New Mess también incluye dos canciones que no estaban presentes en el LP de 2019. “Waving, Smiling” y la canción que da título al álbum, que según Olsen, trata sobre la adicción a las drogas, ser adicto al alcohol, estar de gira, no cuidarse a sí mismo. Claramente no la canción que hace de contraparte al resto del álbum, por el contrario abre la herida nuevamente, quizás de otra forma y sonoramente, como es la canción que da inicio al álbum, nos sumerge en el viaje que será Whole New Mess.
Con un repaso a las dolorosas y quejumbrosas letras de All Mirrors, pero esta vez puestas genuinamente en primer plano. Si el año pasado las letras acompañaban a la brillante producción del cuarto álbum de Olsen, esta vez en Whole New Mess, la simpleza de la producción, la evocación del lo-fi eleva al olimpo las letras de Angel Olsen. No es repetirse el plato con lo mismo, es una nueva forma de entender la mente creativa de esta talentosísima artista.
Recomendamos las canciones: “Whole New Mess”, “(We Are All Mirrors)”, “(Summer Song)” y “Lark”.
Fecha de Lanzamiento: 28 de agosto
Sello: Jagjaguwar
