"Limbos", la oscuridad y dulzura conviven en lo nuevo de Hammuravi

Con un sonido alejado de su estridente y potente bajo, Naty Lane se permite con Hammuravi hacer una pausa para dejar entrar nuevas sonoridades, disonancias, experimentaciones y elementos rústicos. Es así, como juega con su guitarra tradicional, percusiones, violines, flautas, metalófonos, cascabeles, uñas de cabras, dejando atrás la presencia de baterías y guitarras eléctricas. “Limbos” es el primer corte de esta nueva etapa de Hammuravi, un trabajo que nace en un periodo en que la artista, al encontrarse limitada en su movilidad por un accidente en plena crisis sanitaria, decidió trasladarse a la casa de sus padres, en un regreso al nido que le significó revisitar su infancia.

  • "La experiencia de volver a vivir con mis padres, me obligó a enfrentarme conmigo misma y me ayudó a comprender aspectos importantes de mi vida como adulta", reflexiona Naty.

Este adelanto propone una dualidad sonora que transita desde lo oscuro a lo dulce, transmitiendo sensaciones tristes, ensoñadoras y volátiles, haciéndose cargo de aquellos espacios mentales que muchas veces generan expectativas incumplidas, aquellos deseos y anhelos del inconsciente.

El video de “Limbos” se desarrolla en un espacio físico atemporal, en un plano diferente o realidad paralela, integrando elementos rituales. Un recorrido en el que se irán encontrando objetos que se vinculan con la vida de la protagonista y el concepto general de este nuevo trabajo de estudio programado para Mayo y que será prontamente antecedido por un nuevo single.