Bronko Yotte estrena nuevo single “Piola”, una declaración de principios en la que suma la estelar voz de Gianluca

En el camino a su nuevo álbum, Bronko Yotte recorre nuevos rincones con esta colaboración que nos entrega pistas claves de lo que viene, y reafirma su posición en la música donde los egos y la figuración no caben.

  • "Ante el paredón me quedo piola, esta desilusión ya no me controla". El músico chileno sigue construyendo su nuevo largaduración, “Fuero Interno”, un trabajo que viene gestando desde la libertad de la exploración y la inagotable experiencia de rebuscarse en distintas facetas musicales.

Luego de presentar “Matanga” como primer sencillo, y de ampliar el espectro con “Galvano” -destacado por su relato identificable sobre presiones y exitismos-, hoy es el turno de “Piola”, una colaboración entre el habitual equipo liderado por Felipe Berríos junto a Dj Pérez y Macarena Campos, sumado al destacado músico Gianluca.

“Piola” es un universo de detalles musicales incapaces de rotularse en un solo estilo establecido; una colaboración que mantiene las esencias de Bronko Yotte y Gianluca, que en conjunto logran una declaración innovadora de recursos, melodías y verdades.

  • “Quise hacer un hit optimista con Gian. Es el tipo de energía que se necesita en el ambiente ahora, para que tengamos fe y salgamos a cambiar las cosas”, cuenta el músico sobre el featuring.

  • “Siento que con el beat cumplí mi propósito, que era lograr el tipo de canción donde no queda claro si esto es pop, hip hop o trap. Me interesa este lenguaje híbrido de estilos para demostrar que esos límites no importan; lo que vale es hacer un tema bueno, que te motive en tiempos que se necesita”.

“Piola” hace relucir recuerdos y estados, como

  • “mi infancia en un colegio con misas, la egolatría propia del ser músico, la inseguridad que generan las redes sociales, y otras ideas que desembocan en que ahora te sientes bien. Es como el arco narrativo de una terapia, pero en una canción de tres minutos”, asegura.

"Piola" no sólo transita sin pretensiones por intereses sonoros que conforman a Bronko Yotte como un músico sui generis, también empapa con el ímpetu de volver a lo verdaderamente humano, la urgencia de reconocerse y recobrarnos luego del letargo de las lógicas y presiones del capitalismo.