Después de 5 años sin volver a Chile, y con un show de casi tres horas, Super Junior se presentó en el Movistar Arena con su nuevo tour “Super Show 9: Road”, frente a una fanaticada que no paró de saltar y corear todas las canciones, sobre todo los grandes hits, como “Sorry, sorry”, “Lo siento”, y “Mango”, demostrando por qué son los “reyes de la Ola Coreana”.
Por Monserrat Miranda
Foto por Francisco Rojas
Eran las 20:00 horas, y el nombre de la banda surcoreana que ayer convocó a miles de fans en el Movistar Arena, empezaba a sonar con más fuerza: “¡Super Junior, Super Junior!”, fue el comienzo de una energía que no bajó su intensidad en las más de dos horas y media que duró el concierto, y que podía escuchar entre cada canción. Su fanaticada, conocidas como “ELF” (Ever Lasting Friend), habían esperado cinco años para verlos nuevamente, y esa noche, por fin, volverían a encontrarse con ellos.
El regreso de la banda surcoreana se enmarca en el tour mundial Super Show 9: Road, que ya ha visitado Corea del Sur, Filipinas, Indonesia, Malasia, Taiwán, Hong Kong, Indonesia y, próximamente, Brasil, Perú, México, Vietnam y Japón.
A las 20:10 horas, se apagaron las luces y los gritos ahogaron cualquier otro ruido que pudiera haber en ese momento. Inmediatamente después, comenzó a reproducirse un video en las dos pantallas que acompañaban el escenario, donde iban apareciendo uno por uno los ocho integrantes de Super Junior que se presentaron en nuestro país: Leeteuk, Yesung, Shindong, Donghae, Eunhyuk, Siwon, Ryeowook, y Kyuhyun.
A las 20:17, entremedio de gritos, cánticos y luces azules que provenían de las cientos de Lightsticks de las fans, Super Junior apareció en el escenario con Burn The Floor, seguida por "The crown", "Super" y "Mr. Simple", tres canciones que el público coreó a todo pulmón, a pesar de ser cantadas casi completamente en coreano.
Foto por Francisco Rojas
“Lo siento”, canción grabada junto a la estadounidense de ascendencia dominicana, Leslie Grace, y que acumula más de 100 millones de reproducciones en Youtube, llevó el entusiasmo y energía de las ELF a otro nivel; uno donde el ritmo latino y el fanatismo se tomaron por completo el Movistar Arena.
- “Por fin nos vemos después de 5 años, y después de 24 horas de vuelo. No nos costó nada, porque estábamos tan emocionados de volver. Ayer hicimos un viaje por Chile, y nos reconocieron a donde fuera que íbamos. ¿Seguirán así la próxima vez que nos veamos?”, dijo Donghae entre aplausos, chiflidos y gritos de emoción de sus fans.
Sin duda, ese fue uno de los momentos más apreciados entre las ELF, y uno que la banda supo aprovechar con creces (incluso se dieron el tiempo de aprender palabras en español, como “Santiago”, “empanada”, “patio bellavista”, “las quiero mucho”, o “las amo”). En total, hablaron más de 10 minutos, antes de seguir con “Mamacita” y “Small things”, en tema solista de Yesung de su primer álbum, lanzado el 25 de enero de este año.
“Sorry, Sorry”, la canción que consagró a Super Junior en 2009, fue, probablemente, la canción más esperada de la noche, y la cual marcó el punto cúlmine del concierto, haciendo bailar y cantar al unísono a todo el público. Era una coreografía compleja, llena de movimientos uno tras otro, pero
A las 21:50, cuando llevaban poco más de dos horas de show, y luego de abandonar el escenario, el silencio inesperado de las fans, que no entendían si se habían ido realmente, empezaron a gritar el nombre de la banda tímidamente al principio, y luego con más fuerza. Después de pasado unos minutos, “¡otra, otra!”, acompañada de una ola humana que iba desde platea alta a cancha, empezó a escucharse con más fuerza, hasta que la banda volvió por más canciones.
Después de media hora extra de concierto, cuando el reloj ya marcaba las 22:20 horas, los ocho integrantes se detuvieron para expresar lo emocionados y contentos que estaban de volver a Chile. Además, aprovecharon de invitar a las fans a cantar feliz cumpleaños a uno de sus miembros: Kyuhyun, uno de los favoritos del público, y quien se notó agradecido por vivir un día así con sus fanáticas. Después de eso, el clásico “¡la polera, la polera!” llenó el Movistar Arena, logrando que Leeteuk se sacara la polera entre las risas de sus compañeros.
La última canción del concierto fue el esperado cover de “Ahora te puedes marchar” de Luis Miguel, cantada en un español impecable, y donde la banda interactuó de cerca con sus fans, acercándose para tomarse fotos o lanzarles besos y corazones en señal de agradecimiento y cariño.
Foto por Francisco Rojas
A las 22:30, Super Junior comenzó a despedirse mientras aún sonaba de fondo la canción del cantante mexicano, y prometiendo volver a encontrarse con el público chileno. “¡Muchas gracias por esta noche!” y “las amamos” fueron las últimas palabras que se alcanzaron a escuchar antes de desaparecer entre confeti y gritos de felicidad de ese público que coreó todas las canciones y que, seguramente, no olvidará esa noche.