Skrillex lanza su álbum más experimental y provocador: Fuck U Skrillex You Think Ur Andy Warhol But Ur Not!! <3

“Fuck U Skrillex You Think Ur Andy Warhol But Ur Not!! <3” es el cuarto disco de estudio de Skrillex, y también su obra más cruda y radical. Con más de 30 canciones que exploran el glitch, el pop distorsionado y el caos digital, el productor se despide de Atlantic Records para darle vida a su sello.

Por: Paz Rojas

Skrillex vuelve a sacudir la escena electrónica con el lanzamiento sorpresa de su nuevo disco Fuck U Skrillex You Think Ur Andy Warhol But Ur Not!! <3, un título tan desafiante como el contenido que esconde. Con 34 tracks y colaboraciones que van desde Dylan Brady (100 Gecs) hasta Starrah, Wuki y Boys Noize, el productor estadounidense entrega una obra maximalista, caótica y, como hace spoiler en su título, profundamente autoreferencial.

El disco fue anticipado en Ultra Music Festival, donde Skrillex regresó a un escenario principal tras más de una década. El show funcionó como una pista para los fans más atentos, quienes días después recibirían un mail con un enlace al álbum completo, bajo el misterioso nombre “FUS – FULL Album”. Lo demás fue puro vértigo: una fiesta privada en Miami, rumores en foros, y finalmente, el lanzamiento sin previo aviso que ya es parte de su sello.

Explorando el caos: algunas pistas clave

Dentro de este título plagado de ideas y referencias, hay canciones que destacan por su audacia y por condensar bien el espíritu del disco.
"Skream Urself (feat. Dylan Brady)" abre con un estallido de glitch-pop ultra procesado, que rápidamente se desarma en un ritmo frenético, cercano al breakcore que combina muy bien los inicios de Skrillex como cantante de post-hardcore en From First to Last, con las joyas eclécticas de Brady con 100 Gecs. Esta es una pieza que parece más pensada para provocar que para complacer, y marca desde el principio que aquí no hay reglas.

"Not Cute (feat. Starrah)" ofrece uno de los momentos más melódicos del álbum, aunque incluso eso está atravesado por distorsión y cambios abruptos de tempo. La voz de Starrah, casi fantasmal, se balancea entre sensualidad y agresión, en una canción que parece hablar sobre la imposibilidad de encajar en lo que el mercado espera.

"4real_4fake", en tanto, es un track instrumental que podría sonar en una galería de arte digital: glitches, sampleos de voz intervenidos y una atmósfera disonante que se siente más conceptual que bailable.

Y en medio del caos, "Peace Is Not Profitable" aparece como una crítica sutil al estado de la industria, con un beat que se va descomponiendo hasta quedar reducido a puro ruido digital.

Una despedida sin filtros

Musicalmente, este trabajo se aleja de los ganchos inmediatos de sus éxitos anteriores y se adentra en un terreno más libre, ruidoso y ecléctico. Hay momentos donde el glitch se mezcla con pop distorsionado, bases de trap se cruzan con samples lo-fi, y la experimentación digital toma protagonismo por sobre la estructura tradicional de canciones. Es como si Skrillex se burlara de sí mismo, del mainstream, y de la cultura de consumo rápido de la música.

Pero bajo el título irónico y los beats frenéticos, hay también una declaración de principios: esta es la despedida de Skrillex con Atlantic Records, y el álbum suena como un grito de independencia, una obra de arte-pop que abraza el caos y la sorpresa al estilo Warhol.