Qué se necesita para abrirse paso en la industria de la música, ¿talento? ¿solo una buena voz?, ¿o quizás algo más? Esas son algunas de las preguntas se hacen A 20 Pasos de la Fama, el documental que nos muestra la historia de las coristas, su talento inconmensurable y sus anhelos por ser algo más que la voz y el rostro bonito que se encuentra detrás del artista.
Por Valentina Morales
A 20 Pasos de la Fama... Es quizás el título más apropiado que ha tenido un documental musical, quizás en la vida, con fuerte mensaje literal y figurativo. A 20 Pasos de la Fama nos muestra las historias de diversas coristas que ocupan ese espacio, a 20 pasos de las estrellas a las cuales apoyan, y que al mismo tiempo han estado tantas veces tan cerca de transformarse ellas en las artistas que llega a ser doloroso.
Una de las bellezas del documental es cómo, de una manera casi sensorial, nos muestra la importancia de las coristas y utilizo la palabra las en vez de los, porque a pesar de que en la película podemos ver a algunos hombres, es la fortaleza de las voces femeninas, provenientes del gospel y la iglesia la que le proporciona un sabor distinto a las canciones, especialmente al rock de los 60’s y 70’s.
Con historias que van desde una de las pioneras dentro del género como Darlene Love, pasando por Lisa Fischer que obtuvo un Grammy por su exitazo de los 90’s “How Can I Ease The Pain”, hasta su llegada a los Rolling Stones.
La gran pregunta que el documental trata de responder es por qué estas super, mega, extremadamente talentosas artistas nunca fueron más que una corista. Por qué no tuvieron el estrellato de Aretha Franklin, Tina Turner, o las bandas a las cuales acompañaron. Algunos alegan que hay que tener cierto ego para tener una carrera en solitario, otros dicen que es distinto cantar coros para alguien a tomar las riendas de lo que tú (y el sello discográfico) consideran correcto, otros dicen que es serendipia y un golpe de suerte del destino. Lo cierto es que en algunos casos las artistas siguen abriéndose camino, quizás nunca llegando a un estrellato total, pero sí logrando una carrera sostenible en el tiempo. Otras se sienten más cómodas cantando con alguien más y algunas simplemente perdieron su oportunidad en el momento y no la tomaron.
Quizás una de las ideas más brutales del documental y quizás algo que todos podemos intuir un tanto es que mucho de la industria de la música es un cueazo total. Es estar en el momento justo, queriendo algo justo, cantando la nota precisa.
Estas son algunas de las mejores cantantes del planeta, y no solo que llegan a las notas correctas si no que la interpretación de cada nota es total. Son mujeres que CANTAN. Sin embargo el estar en el spotlight de manera total, les ha sido elusivo.
No obstante hay una especie de silver lining al final, pero quedan completamente invitados a ver la película, ganadora del premio de la Academia a mejor documental en 2012, para que lo descubran ustedes.