Los mejores discos de Billy Idol: el eterno rebelde del rock

Billy Idol es uno de esos artistas que lograron capturar el espíritu de toda una generación. Con su mezcla de punk, rock y actitud provocadora, el músico británico se consolidó como una figura clave de los años ochenta, gracias a una serie de discos que hoy siguen siendo esenciales para entender la evolución del rock moderno. A continuación, repasamos algunos de los más destacados de su carrera. Cada vez falta menos para el reencuentro de Billy con el público chileno el próximo martes 18 de noviembre en el Movistar Arena.

Por: Álvaro Rodríguez

1. Billy Idol (1982)

Su debut como solista marcó el punto de partida de una nueva era para Idol. Con temas como Hot in the City y White Wedding, el álbum logró posicionarlo rápidamente en las listas y definir su estética: una mezcla de rudeza punk con sensualidad y glamour. Fue el disco que encendió la chispa de su carrera global.

2. Rebel Yell (1983)

Probablemente su obra maestra. Rebel Yell no solo consolidó su fama, sino que también se transformó en uno de los discos más representativos del rock de los ochenta. Canciones como Eyes Without a Face, Flesh for Fantasy y el explosivo tema homónimo se convirtieron en himnos. Con una producción brillante y el inconfundible sonido de la guitarra de Steve Stevens, el disco llevó la rebeldía de Idol a su punto más alto.

3. Whiplash Smile (1986)

Más experimental y con un sonido más elaborado, este trabajo amplió el universo musical de Billy Idol. Temas como To Be a Lover y Don’t Need a Gun muestran un artista en plena búsqueda creativa, combinando sintetizadores con su característico tono rebelde. Aunque no tuvo el impacto masivo de Rebel Yell, hoy es considerado una joya subestimada de su discografía.

4. Charmed Life (1990)

Con la llegada de los noventa, Idol mantuvo su fuerza con un álbum sólido que incluyó uno de sus mayores éxitos: Cradle of Love. El disco reafirmó su capacidad para reinventarse sin perder identidad, y demostró que su magnetismo seguía intacto pese a los cambios en la industria musical.

5. Kings & Queens of the Underground (2014)

Tres décadas después de su debut, Idol regresó con un trabajo maduro y nostálgico, pero lleno de energía. En este disco, producido por Trevor Horn, el músico reflexiona sobre su vida y carrera, entregando canciones más personales como Can’t Break Me Down y Save Me Now. Un testamento a su vigencia y capacidad de evolución.
Un legado que no envejece

Billy Idol no solo fue una cara reconocible del rock ochentero; también fue un puente entre el punk y el pop, entre la actitud rebelde y el éxito comercial. Su discografía, plagada de riffs memorables y estribillos incendiarios, sigue siendo una banda sonora indispensable para quienes buscan entender por qué el rock nunca pasa de moda.