En un breve pero intenso show, Limp Bizkit revolucionó el Banco de Chile Stage a base de sus mejores éxitos y una tremenda convocatoria que no paró de saltar. Fred Durst y compañía dieron la cuota de nu metal necesario en la primera jornada del festival, tirando toda la carne a la parilla y generando los mosh más impresionantes del día.
Por José Tomás Prado
Foto por Daniela Toledo
Con un atardecer de fondo, el Banco de Chile Stage vio como un colorido Fred Durst era inundado en aplausos por la multitud que celebraba el reencuentro de Limp Bizkit con nuestro país tras 8 largos años. Como si fuera una carrera contra el tiempo, los abanderados del nu metal dieron la cachetada inicial con la monstruosa “Break Stuff”, desatando una locura poco antes vista en el recinto de Cerrillos.
Un show que apeló a lo mejor que la polémica banda puede ofrecer dentro de sus capacidades. Como se esperaba desde que se anunció el line up de esta edición del festival, los estadounidenses fueron directo al grano con una seguidilla de clásicos que generaron los mosh más grandes y destructivos de la primera jornada del festival. Desde “Rollin” hasta “My Way”, Fred y compañía se empeñaron en encender al público con potentes riffs y sonidos de scratch que mezclaron el metal con el rap de la mejor manera.
Como era de esperar, la banda apeló a no tomarse tan en serio el hecho de ser headliners de un festival internacional y bromeó con covers que bordearon lo insólito, dejando potentes y coreadas versiones de “Heart-Shaped Box” de Nirvana y “Behind Blue Eyes” de The Who.
La presencia de Fred era suficiente para encender a un público que parecía una barra brava, coreando cada larga pausa entre canciones y dando todo de sí para que en algún momento el cantante dijera: “ustedes están completamente locos”.
Pese a un sólido sonido, la banda guardó gran parte de su repertorio para ir a la segura gracias al apoyo de covers en vez de desplegar más piezas de sus 5 álbumes de estudio. Aún así, el público hizo vista gorda y pareció enfocarse sólo en disfrutar el poder ver en vivo a la banda que acompañó a tantos adolescentes en el inicio de los 2000.
Ya cerca del final del set, Fred se pronunció para dar con un momento que nadie se esperaba: “¿Qué es mejor que 1?... 2” dando paso por segunda vez a “Break Stuff” para cerrar en lo alto el reencuentro de los chicos malos del nu metal con nuestro país. Ya en la despedida, la banda se acercó a las primeras filas para agradecer el cariño de las y los presentes, todo esto mientras de fondo sonaba el clásico futbolero “Chileno de Corazón” y la barra brava volvía a decir adiós.
Fotos por Daniela Toledo A.
LIMP BIZKIT