El emblemático festival se ha caracterizado históricamente por tener a los más grandes exponentes del rock entre sus carteles. A tan sólo dos días de su edición 2024, en Sunderbeats realizamos una pequeña selección con nuestras favoritas para calentar motores.
Royal Blood (2018)
Inglaterra, al igual que Lollapalooza, siempre a la vanguardia. Los ahora principales abanderados de mantener viva la esperanza de la música rock se presentaron por primera vez en nuestro país durante la segunda jornada de aquella edición 2018 con grandes nombres del rock como cabezas de cartel. A pesar de un cambio de horario y escenario por problemas en el traslado de instrumentos, el dúo conformado por Mike Kerr en el bajo y Ben Thatcher en la batería en encargó de reventar el Acer Stage con un sonido tan potente que llegó a opacar lo que sucedía en los otros escenarios.
Con dos álbumes bajo el brazo, la novedosa propuesta del dúo británico cumplió las expectativas de un público que mosheó y coreó intensamente cada tema durante 45 minutos que quedaron cortos. Acompañado de la genialidad de aquel bajo conectado a amplificadores de guitarras y bajo de manera simultánea, los riffs de aquella noche resonaron en muchas personas que no estaban familiarizadas con la banda, pero que terminaron sudadas de tanto saltar entre un público en éxtasis.
Desde el vamos con “Where Are You Now?”, hasta un cierre épico con la monstruosa “Out Of The Black”, el dúo se guardó al público en el bolsillo y se dio el tiempo para acercarse a las primeras filas para agradecer las profundas muestras de cariño y entregar un necesario vaso de agua. Destacado posteriormente como una de las mejores muestras de rock de aquel edición festival por diversos medios, Royal Blood supo estar a la altura y lograr conectar por primera vez con un público chileno que espera impacientemente por un reencuentro que este año por fin será una realidad.
Pearl Jam (2013)
Aquella tercera edición del festival tuvo como plato principal a los sobrevivientes de aquel feroz Seattle de los 90s. Año y medio atrás, la banda liderada por el inconfundible Eddie Vedder había pisado nuestro país para dar un concierto en el Estadio Monumental que presentó varios altibajos, por lo que las altas expectativas en el contexto de un festival que poco a poco se volvía más masivo estaban fundamentadas.
Bajo el sereno inicio de “Release” la banda logró congregar a más de 65 mil personas en el Claro Stage, hasta que la explosividad que trajeron consigo temas como “Go” y el clásico del grunge “Even Flow” reventaron el parque de espíritu rock. Con una energía envidiable tras tantos años de giras y hermandad musical ininterrumpida, Pearl Jam logró conectar profundamente con los presentes en el Parque O´higgins aquel 6 de abril. Con el carisma que lo caracteriza, Eddie buscó dialogar con su público tanto en inglés como en español, regalándonos probablemente una de las frases más icónicas de la historia del festival: “El vino chileno es más rico que la chucha”.
Recordada como una de las mejores visitas de la banda a nuestro país, el show tuvo la particularidad de recorrer grandes hitos de su repertorio con un sonido impecable que impresionó incluso a aquellos que asistieron al festival por otros artistas. Al igual que en su anterior visita, la banda se tomó el tiempo para invitar a un fanático al escenario para interpretar una preciosa versión del cover “Sonic Reducer”. Desde pasajes acústicos con las clásicas “Daughter” y “Elderly Woman Behind The Counter in a Small Town”, hasta la explosión de adrenalina con “Porch” o la inigualable “Alive”, Eddie y compañía volvieron a conectar con nuestro país y dejar claro por qué son una de las bandas más importantes de la historia del rock.
Como siempre, lo mejor quedó para el final. Tras una breve pausa, el líder de Pearl Jam se encargó de llamar a Josh Homme y a Perry Farrel a escena para ir cerrando lentamente el telón con una épica versión del clásico de Neil Young “Rockin´ in the Free World”. Tanto el líder de Queens of The Stone Age (que horas antes había desatado la locura en el mismo escenario) como el big boss del festival y líder de Jane´s Addiction, se encargaron de unirse a la banda en una interpretación que quedaría para siempre en la retina de aquellos afortunados asistentes a la tercera edición del festival en nuestro país. Un momento para enmarcar que dejaría la mesa puesta para que la estupenda “Yellow Ledbetter” cerrara con broche de oro una presentación que dejó la vara alta para los headliners de Lollapalooza hasta el día de hoy.