La banda costarricense de rock alternativo Caucel, está protagonizando su año más activo hasta ahora. Este año suman ya dos lanzamientos dobles, los cuales se perfilan más frescos y modernos, producidos al lado de los artistas y productores nacionales Ignacio Coto, aka Selvas y Ricardo Vargas conocido como Felino Taurino.
Caucel es una banda costarricense que vio la luz en el año 2019 con un EP debut de 6 canciones llamado “Low Light”. Actualmente la agrupación está conformada por Fabián Escala (vocalista principal y guitarrista secundario), Pablo Luna (bajista), Pablo Matamoros (baterista) y Jaffet Víquez (guitarrista principal).
Originalmente Caucel se denomina como un proyecto de rock alternativo, influenciado principalmente por el movimiento musical de rock pop que surgió durante los 90’s en Norte América y Europa.
Su propuesta musical también se caracterizaba por tener algunos matices de indie y pop contemporáneo, sin embargo, su nueva música viaja por muchos lugares y épocas; construyendo así un sonido mucho más propio y original.
Este año Caucel ha sorprendido la escena local por un periodo de actividad muy constante, que se ha visto marcado por la colaboración con otros agentes de cambio en Costa Rica, como lo son Felino Taurino, Nacho Coto y MØHNE.
El primer lanzamiento de este año fue “Tied Rope”, una canción producida por Nacho Coto y masterizada por Felino Taurino. Tan solo un mes después se estrenó un remix de MØHNE, mismo que tuvo éxito en radios y plataformas de difusión en Costa Rica.
Más recientemente la banda costarricense Caucel estrenó “Hollywood”, el segundo sencillo del nuevo EP, el cual lleva por nombre “Nobody in Town” y ya está disponible en todas las plataformas digitales.
Al igual que el lanzamiento anterior, esta canción se estrenó en un doble formato al mismo tiempo, incluyendo su versión de estudio con banda y una versión remix a cargo del indomable Felino Taurino.
- ”Creo que este nuevo disco, desde un punto de vista técnico, representa una evolución progresiva y lógica en el sonido de Caucel. A nivel personal, significa una ventana de escape, para algunas ideas que me inundaron los pensamientos durante la cuarentena del año pasado. Es un conjunto de reflexiones personales y críticas a fenómenos sociales, políticos y metafísicos”, mencionó Fabián Escala.
También agregó que gran parte de su interés es que la audiencia pueda encontrar puntos de reflexión en el contenido de las letras, como una forma de desahogo de energía y sentimientos encontrados en la música.