En una nueva visita a nuestro país, esta vez en solitario y junto a Ca7riel & Paco Amoroso, el músico demostró ante miles en el Estadio Monumental por qué es el nombre más atrevido del rap actual.
Por: Matías Muñoz
K.Dot, Kung Fu Kenny, Mr. Morale. A través de todas sus encarnaciones, su presencia sobre cualquier escenario y por supuesto su lírica, Kendrick Lamar propone con una cuidada y cinematográfica puesta en escena un explosivo y completo show, en lo que sería el regreso del Estadio Monumental al circuito de conciertos.
Los invitados de honor, Ca7riel & Paco Amoroso, encendieron la tarde con su pegajosa y novedosa movida que aún pareciera tener bencina para rato. El dúo argentino que ya ha pisado tres veces escenarios chilenos en un año, volvió a demostrar que su energía no se acaba y la vigencia de su propuesta sigue cautivando y encantando aun cuando mantienen la receta que los hizo conocidos y virales en el mundo entero.
Eso sí no se guardaron nada. Si bien el show fue más acotado, las cabezas inflables y la ropa estrafalaria no faltaron en su versión del "Papota" show. Cubiertos con chaquetas diseñadas a partir de balones de fútbol, los amigos siguen en la cima del mundo.
Desde su sorpresivo anuncio en nuestro país, el "Grand National Tour", que en EEUU compartió junto a SZA, parecía sembrar dudas sobre el debut de Lamar en formato estadio. Sin embargo, el público chileno respondió al entusiasmo y nivel del músico, con un recinto casi a toda capacidad y que estallaba en cada una de las 29 canciones que completaron las 2 horas de espectáculo.
Y es que comentar un show de estas características no es fácil. Kendrick Lamar en Chile fue una explosión de principio a fin, que transitaba entre diferentes emociones bajo el concepto de "GNX" (2024), el último trabajo del artista.
"Grand National Tour" consta de 4 actos donde se muestran diferentes entornos en el escenario y una especie de cortometraje en las gigantescas pantallas. Protagonizados por sí mismo, los fragmentos muestran un tributo a Los Angeles y al sonido clásico del West Coast. "Wacced Out Murals" y "Squabble Up" sonaron fuerte de entrada acompañadas de fuego y explosiones. "N95", "King Kunta", de su primer disco, y "ELEMENT.", otro clásico, complementaron la primera parte, que inició con casi 20 minutos de retraso.
El show en su cuidada estructura es visualmente muy atractivo. Casi como una película, la dirección de cámaras, fotografía y gráficas no dejan nada al azar y obligan a mantener la atención incluso cuando el artista se pasea por la extensa pasarela junto a un cuerpo de baile. Oculto por un telón o perdido entre los escalones de una escalera que adornaba el escenario como único elemento durante el primer acto, las imágenes que acompañaban al espectáculo eran encantadoramente bellas.
A medida que pasaban las canciones, los actos sumaban nuevos elementos sobre el escenario, que acompañaban los juegos de luces, el fuego y la pirotecnia. La intensidad de cada beat retumbaba en cada rincón mientras Kendrick pasaba entre "euphoria", "HUMBLE." -que desató la locura-, "family ties", la viral "peekaboo" -que desató otra locura- "DNA." y la emotiva "LOVE." bajo un mar de linternas y celulares.
Kendrick Lamar sobre el escenario puede ser Kung Fu Kenny, K.Dot o cualquiera de sus alter egos. Su show es una especie de culto en el que su figura profética aparece y desaparece, cambiando de registro vocal, de puntería con sus letras e incluso de escenografía simulando los adornos colgantes de un auto y el auto mismo (un Buick Grand National). En su show todos son bienvenidos, sobre todo cuando se trata de celebrar los orígenes.
Pero incluso él tiene sus enemigos. "Not Like Us", la popular canción dedicada a Drake que se hizo viral y explotó en el Super Bowl este mismo año fue uno de los puntos altos en que todo el estadio coreó y cantó mientras sobre el escenario, Lamar era escoltado por su grupo de baile.
Su vigencia e influencia manifiesta es testimonio de una manera diferente de hacer las cosas. Considerado como uno de los mejores exponentes de su género y merecedor de diferentes premios que lo confirman, Kendrick Lamar pone a miles nuevamente a sus pies para entregar con dedicación y respeto uno de los mejores shows del año.
Setlist:
wacced out murals
(extended intro)
squabble up
N95
King Kunta
(until "ghostwriter" line)
ELEMENT.
(first two verses)
tv off
(part 1)
Act 2
euphoria
hey now
reincarnated
(no second verse)
HUMBLE.
Backseat Freestyle
(1st verse)
family ties
(Baby Keem cover) (1st verse)
Swimming Pools (Drank)
(1st verse)
m.A.A.d city
(new arrangement; part 1; contains elements of Anita Baker's "Sweet Love")
Alright
man at the garden
Act 3
dodger blue
peekaboo
Like That
(Future & Metro Boomin cover)
DNA.
(part 1)
GOOD CREDIT
(Playboi Carti cover)
LOVE.
Count Me Out / Bitch, Don't Kill My Vibe
Money Trees
(1st verse and bridge)
Poetic Justice
(1st verse)
Act 4
luther
tv off
(part 2)
Not Like Us
gloria