Fiesta Grado Tres: Un viaje al corazón de los 2000

Es viernes, prendes la tele a las 18:00 para no perderte una nueva edición del Diario de Eva; hoy se enfrentarían Pokemones contra Emos, para demostrar que tribu urbana es más popular entre los adolescentes. Eliges tu outfit, una polera de calaveras y un short corto negro, junto a tus infaltables pantys rotas. Para el pelo escoges algo simple, una chasquilla de lado tapando el ojo. Todo este ritual lo haces escuchando Sin despertar de Kudai de fondo, mientras tu hermana en la otra pieza, completamente opuesta a ti, canta a todo pulmón Maldito Amor de Supernova.

Por: Paloma Campos

Foto: Daniela Toledo

Los 2000, ¡vaya época!, quien diría que ya han pasado más de veinte años desde que guardaste tus accesorios negros y que tu mamá te retaba por la música que escuchabas. Pero aunque el tiempo pasé casi volando, y comienzas a temer por las cuentas, hijos y esa cana rebelde que ya no puedes esconder, toda tu juventud la recuperas un día al año, en la esperada Fiesta Grado Tres; organizada por La bodeguita de Nicanor, la iniciativa comenzó en Concepción, pero año a año ha ido expandiéndose a diversas partes de Chile, siendo la edición de 2025 uno de los eventos más esperados del verano.

Entre espuma, confeti y bombitas de agua, el show generó un ambiente de disfrute, el cual logró apaciguar los tediosos 26 grados del finde, escuchando y viendo a artistas de primer nivel. A las dos de la tarde abrió el día el conjunto Tronic, quienes subieron al escenario con su característica camiseta tableada y toda la energía para revivir su pasado. Los artistas tocaron sus mejores éxitos, motivando a los asistentes que, poco a poco, iban llenando el gran recinto.

Luego del gran inicio, el Club Hípico se tiñó de fucsia y celeste para recibir a las recordadas Supernova, dúo infaltable del festival, quienes esperan ansiosamente la invitación anual a Grado Tres. Su performance destaca el sentimentalismo que viven al cantar sus canciones, letras que trascienden generaciones y que reviven los banales problemas de una vida adolescente. El éxito que tuvo Supernova es una emoción ferviente en mi corazón de fan; que ellas hayan logrado crecer y mantenerse en el corazón de las adolescentes –ahora adultas– es un logro importante en su carrera, especialmente si pensamos que ellas cantan desde que solo eran adolescentes, en una industria guiada por el machismo y con los brutales estándares de belleza de los 2000. Ambas Constanzas, quienes mantienen el grupo hoy en día, siguen transmitiendo toda la vibra optimista de sus canciones, dejando claro que no importa cuanto pasen los años, sino el cariño y amor que se le tiene al trabajo que haces.

Posterior al impactante dúo de brillos y pulseras de colores, Kudai llega para ponerle fin a los ritmos alegres. Retornando directamente a los días de querer ser emo, participar en Yingo y salir en un capítulo del Diario de Eva. Los cuatro cantantes vivieron un momento especial en Concepción: el cariño y recuerdo del público es brutal en nuestra ciudad, quienes no dejaron ninguna letra sin cantar. “Sin despertar”, uno de sus temas más recordados, fue sin duda la que se llevó el estelar; fue tal el volumen de los cantos, que en un momento los artistas pasaron a segundo plano, siendo el público y sus recuerdos todo lo que se podía sentir en el ambiente.

Ya llegando a la mitad del día, Glup! Hizo que todos saltaran al ritmo de los bajos. Koko, la voz principal, nació para la puesta en escena, siendo su sensual manera de desenvolverse lo que cautivó a hombres y mujeres que los veían. Su show revivió el sentimiento de ser una freebola, e incluso invitó a fans a corear junto a ellos su romántica canción Cómplice Eterno. Una experiencia memorable tanto para la fan que subió, como para quienes la veían, ya que el resultado de ese momento fueron risas y gritos enamorados de la audiencia.

Pasadas las 17:00 horas, las bandas internacionales dieron vida a un segundo ambiente en la Fiesta Grado 3. Fulanito desató la energía del público con su movida armonía y exóticos bailes, mostrando todo el sabor del merengue y el guallangueo mientras disfrutaban al máximo de estar sobre el escenario. Tras ellos, Proyecto Uno, la icónica banda de merengue house y tropical, continuó con la fiesta, haciendo bailar a todos con su mezcla única de ritmos latinos y urbanos. Interpretaron grandes éxitos como El Tiburón y Está pegao, transportando al público a los años 90 y dejando claro que su música sigue siendo tan vibrante y contagiosa como siempre. Su participación se consolidó como uno de los momentos más destacados de la noche, reafirmando su lugar como pioneros en poner sabor y alegría en cada escenario que pisan.

666, la explosiva banda de techno y eurodance, revitalizó al público que, tras más de 9 horas de fiesta, encontró en su potente espectáculo una nueva dosis de energía. Con beats contundentes y letras irresistibles, temas como Alarma y D.E.V.I.L. transformaron el ambiente en una pista de baile imparable. La intensidad de su actuación, combinada con su presencia escénica arrolladora, dejó al público atrapado en una experiencia tan enérgica como electrizante, consolidando su lugar como maestros de la fiesta acompañados de la icónica Anita María Muñoz.

Por su parte, 2 Unlimited reforzó la euforia colectiva con un show cargado de fuerza y carisma. Al ritmo de éxitos como No Limit y Get Ready for This, lograron que la multitud saltara, coreara y vibrara en perfecta sintonía, llenando el lugar de pura adrenalina. Su impecable manejo del escenario y la conexión casi magnética con los asistentes los convirtieron en uno de los actos más destacados de la jornada, reafirmando su legado como íconos del dance y el techno.

A*Teens, la banda tributo a ABBA, aportó un toque nostálgico y brillante a la Fiesta Grado 3, transportando al público a la época dorada del pop sueco. Con sus característicos trajes brillantes y sus armonías vocales perfectas, interpretaron éxitos inolvidables como Dancing Queen y Mamma Mia, provocando que el público cantara y bailara con una energía renovada. Su show no solo rindió homenaje a ABBA, sino que también logró capturar la esencia de la magia y la alegría que sus canciones siempre transmiten, convirtiéndolo en uno de los momentos más vibrantes de la noche.

La organización de la Fiesta Grado 3 y La Bodeguita de Nicanor no dejó detalles al azar, ofreciendo una experiencia única tanto en el escenario como fuera de él. Desde el impresionante cartel de artistas hasta la ambientación cargada de sorpresas, cada rincón del Club Hípico se llenó de color y emoción. La atención al detalle, la diversidad de los géneros musicales y el cuidado en la producción garantizaron que este evento se consolidara como uno de los más esperados del verano, destacando no solo por la calidad de sus shows, sino también por la organización impecable que permitió que la fiesta fluyera sin interrupciones. La Fiesta Grado 3, en su edición 2025, logró lo que muchos esperaban: una celebración inolvidable de la música y la nostalgia de los 2000.