Tokio Hotel en Teatro Caupolicán: 14 largos años después

Tuvieron que pasar más de 14 años para que el público chileno volviera a disfrutar en vivo de Tokio Hotel. La banda alemana, liderada por los hermanos Bill y Tom Kaulitz, ofreció un espectáculo inolvidable sobre el escenario del Teatro Caupolicán. La velada reunió a un público diverso, compuesto por distintas generaciones, quienes se emocionaron, corearon cada canción y se entregaron por completo a la música de un grupo que ha dejado una profunda huella en sus vidas, marcando a generaciones con su inconfundible estilo y carisma.

Por: Álvaro Rodríguez Cárdenas

Foto: Luis Marchant

Tokio Hotel es una banda de pop rock formada en 2001 en Magdeburgo, Alemania, por los hermanos Kaulitz, junto a Georg Listing y Gustav Schäfer. Desde sus inicios, han construido una trayectoria destacada, con siete álbumes de estudio que reflejan su evolución musical. Su último trabajo, titulado "2001", fue lanzado este año como un tributo a sus orígenes y sus más de dos décadas de carrera. Este álbum no solo reafirma su creatividad, sino que también marcó su tan esperado regreso a tierras chilenas tras más de una década de ausencia. Su presentación en el Teatro Caupolicán fue una muestra de gratitud y un espectáculo cargado de emoción, que mantuvo al público al borde de la euforia canción tras canción.

Esta fue oficialmente la segunda visita de Tokio Hotel a Chile, pero las circunstancias que rodearon su historia con el público local la hicieron aún más especial. La primera vez que la banda se presentó en el país fue en 2010, en pleno auge de su carrera, llenando el Movistar Arena con miles de seguidores que los acompañaron antes de su receso, que se extendió hasta 2014. En 2015, la agrupación había anunciado un concierto en el Teatro Caupolicán, pero este fue cancelado inesperadamente el mismo día debido a conflictos entre la productora y el tour manager. Este incidente dejó a los fans profundamente desilusionados. Años más tarde, en 2020, el regreso también se vio frustrado por la pandemia. Por eso, cuando esta nueva visita se confirmó, el entusiasmo se mezcló con nerviosismo, especialmente después de que la banda cancelara un concierto en México poco antes de su presentación en Chile. Sin embargo, esta vez todo salió perfecto, permitiendo que Tokio Hotel se reuniera con un público que los esperaba con ansias desde hacía mucho tiempo.

El espectáculo estaba programado para las 20:30 horas, un horario ideal considerando la diversidad de edades entre sus seguidores, con una gran presencia de adolescentes. Desde temprano, los fanáticos comenzaron a llenar la cancha, mientras las tribunas se ocupaban lentamente. Inicialmente, el evento había sido anunciado en el Teatro Teletón, pero el éxito en la venta de entradas obligó a trasladarlo al Teatro Caupolicán, un recinto más amplio que reflejaba la magnitud del fervor por la banda.

A las 20:50, las luces del recinto se apagaron y la música comenzó a sonar. El telón cayó, revelando a Tom Kaulitz, Georg Listing y Gustav Schäfer en el escenario, mientras el público estallaba en gritos. Poco después, entre humo y luces, hizo su entrada Bill Kaulitz, vistiendo un llamativo traje de una pieza con plataformas y sombrero vaquero, desatando la euforia general. Los primeros acordes de temas como White Lies, Automatic y The Heart Get No Sleep llenaron el recinto, mientras el público coreaba cada palabra con total entrega.

La puesta en escena, aunque sencilla, fue impactante por la conexión emocional que la banda logró con sus seguidores. Este reencuentro era más que una presentación; era el cierre de un ciclo de años de espera. Entre el público, había jóvenes que apenas comenzaban a descubrir la música de Tokio Hotel, así como adultos que revivían recuerdos de la primera vez que los vieron en 2010. La banda mantuvo un ritmo vibrante, cerrando la primera parte del show con temas icónicos como Feel It All y Home, que hicieron vibrar el Caupolicán.

La velada incluyó un emotivo segmento acústico con canciones como Black y Just a Moment, en el que la sencillez de la interpretación resaltó la calidad vocal de Bill Kaulitz y el talento instrumental de la banda. Esta sección fue recibida con ovaciones. Posteriormente, el ritmo volvió a subir con temas como Easy, What If y Darkside of the Sun. La intensidad del espectáculo provocó incluso algunos desmayos entre el público más joven, aunque afortunadamente todo se manejó sin incidentes graves. Durante la presentación, la banda agradeció repetidamente la lealtad y paciencia de sus fanáticos chilenos, quienes esperaron 14 años para este reencuentro tan especial.

La noche fue, sin lugar a dudas, mágica para los seguidores de Tokio Hotel. Tras 14 años de espera, la conexión entre la banda y su público chileno fue palpable en cada canción, cada aplauso y cada grito de emoción. Este reencuentro no solo reafirmó la relación especial entre Tokio Hotel y sus fanáticos, sino que dejó claro que los alemanes siempre tendrán un lugar especial en Chile. Una relación que se selló para toda la vida, demostrando que, a pesar del paso del tiempo, la música sigue siendo un puente entre generaciones y culturas.

Setlist

White Lies
Automatic
The Heart Get No Sleep
Girl Got a Gun
World Behind My Wall
Feel It All
Home
Black
Just a Moment
Run, Run, Run
HIM
Spring nicht
Easy
Love Who Loves You Back
What If
Darkside of the Sun
Colors of the Wind
Monsoon
Runaway

Galería fotográfica por Luis Marchant