El próximo 21 de Febrero Sting regresa a Chile en el marco de su gira “STING 3.0”, en esta ocasión acompañado por el guitarrista Dominic Miller (Bryan Adams, Phil Collins, Rod Stewart, Peter Gabriel, entre muchos otros) y el baterista Chris Maas (Mumford & Sons, Maggie Rogers). Si bien es cierto la figura excluyente del británico se caracteriza principalmente por su aporte musical en sus más de cuatro décadas de trayectoria, tanto durante su periplo con The Police como a través de su carrera solista, lo cierto es que el nativo de Wallsend también ha sido capaz de reinventarse y convertirse en un destacado empresario, sacando provecho tanto de su obra como de su imagen.
Por: Gustavo Inzunza
El artista se ha convertido en uno de los músicos más ricos del mundo gracias a los derechos de autor que percibe por sus canciones, siendo el éxito “Every Breath You Take” uno de los casos más emblemáticos alcanzando más de 18 millones de euros en royalties desde que se estrenó en 1983. Es conocido el caso de Sean Diddy Combs (Puff Daddy) que utilizó sin autorización parte de esta canción en su tema “I’ll be Missing You” dedicado al rapero neoyorquino The Notorious B.I.G, lo que le significó tener que llegar a un acuerdo legal con Sting que se tradujo en el pago de US$2.000 diarios por el resto de su vida. Otro caso es el del fallecido rapero Juice WRLD, que utilizó un sample del tema “Shape of My Heart” (1993) en su exitoso single “Lucid Dreams”, lo que le costó tener que ceder una parte importante de las ganancias que el tema percibe por concepto de reproducciones en plataformas digitales, algo así como 15 millones de euros al año.
En 2022, el músico decidió sumarse al selecto grupo de artistas en vender la totalidad de su catálogo a Universal Music Publishing Group (UMPG), que a su vez engloba a los sellos A&M, Interscope y Cherrytree Records, en una operación por un monto cercano a los 300 millones de dólares. Los motivos detrás de esta decisión fueron principalmente dos: los impuestos y la pandemia. Por un lado los altos impuestos que rigen los grandes capitales de EEUU hacen que percibir dinero por concepto de derechos de autor suponga una gran carga impositiva, y a raíz de la última crisis sanitaria los músicos se vieron en la obligación de suspender sus presentaciones en vivo, una de sus mayores fuentes de ingreso, debiendo buscar alternativas para rentabilizar su trabajo.
Pero no solo de la música vive Sting, también ha sabido incursionar con éxito en otros negocios. En 1997 junto con su segunda mujer, Trudie Styler, adquirieron una villa en La Toscana, la villa del Il Palagio, una villa del renacimiento florentino situada en el pueblo de Fligine Valdarno a 30 minutos de Florencia. Esta propiedad está formada por 350 hectáreas de terreno y un lujoso palacio del siglo XVI, y en la actualidad produce alrededor de 150.000 botellas de vino al año, de las que es responsable el reconocido enólogo Riccardo Cotarella.
El Movistar Arena será el escenario responsable de albergar una nueva visita de Sting, en un show que ya cuenta con la totalidad de los locaciones agotadas y que como es costumbre promete un viaje inolvidable a través de lo más selecto de la discografía del icónico músico inglés.