El Movistar Arena fue testigo del primer paso de lo que será el Festival Primavera Sound Santiago de la mano del Road To Primavera Sound. La jornada estuvo liderada por los shows de grandes artistas como Pixies, Jack White, Cat Power y la banda local Niños del Cerro. La noche dejó gratas sensaciones en todos los asistentes al evento, los que olvidaron por completo la hora y el día (domingo) y gozaron con la música de grandes exponentes de la música.
Por Álvaro Rodríguez
Forto por David James Swanson
El Road To Primavera Sound es la primera de las jornadas que tiene el festival, una especie de previa a lo que será el evento principal en nuestro caso el mes de noviembre. Estaba planificado para ser realizado en primera instancia en Ciudad Empresarial, pero un mes antes de su realización la productora optó por cambiar de recinto y llevarlo al Movistar Arena, para que los fanáticos pudieran disfrutar de mejor forma los shows. Pixies, Cat Power, Jack White y Niños del Cerro fueron parte de este evento.
El único representante nacional, y encargado de abrir la jornada, fue la banda Niños del Cerro, quienes llegan en pleno lanzamiento de su álbum “Suave Pendiente”. Indudablemente, la banda aprovechó la ocasión para promocionar este último trabajo, ya que el set se compuso casi íntegramente de tracks de ese LP como “El Dulce En La Piel De Tu Nombre”, “Tentempié” o “Esta Enorme Distancia”, donde el saxofonista chileno Franz Mesko los acompañó en el escenario.
Foto por Bastián Cifuentes Araya
Cat Power fue la segunda en subir al escenario siendo las 19:15, donde la artista estadounidense acompañada de su banda entregó un show marcado por la emoción de sus letras y su apacible voz que a pesar de algunos problemas en su garganta por algún tipo de resfrío la cantante pudo sacar adelante sin ningún problema su show. La atmósfera que genera en sus presentaciones es impactante, logra mantenerte concentrado en sus canciones y olvidar por un momento todos tus pensamientos y disfrutar de su música.
Foto por Bastián Cifuentes Araya
Foto por Gary Go
Una puesta en escena sencilla muy característica en sus presentaciones fue suficiente para conquistar al público que se hacía presente en el Movistar Arena. Sencillos como The Moon, Metal Heart o The Greatest fueron parte del setlist entregado por la norteamericana.
Por lejos uno de los artistas más esperados del Road To Primavera Sound era sin lugar a dudas fue el músico estadounidense Jack White. El multiinstrumentista apareció en el escenario ante la ovación de un Movistar Arena que en ese momento ya estaba lleno y lo esperaba con mucha expectación y se notó apenas se dio el vamos. Con la primera canción sonando la reacción del público no se dejó esperar y la complicidad entre el artista y sus fans fue muy notoria.
Forto por David James Swanson
La energía que evoca Jack White es sorprendente, una capacidad de improvisación sobresaliente, generaba una atmósfera especial con su juego de luces, los tonos azules, y sus canciones que son himnos para sus fans. Que saltaron y disfrutaron con cada sencillo. El cierre de su presentación fue por todo lo alto de la mano del éxito Seven Nation Army de la época de The White Stripes fue sencillamente inolvidable, la pasión desbordada por White y el público que acompaño de forma natural fue una combinación perfecta que dejo en claro la calidad de músico y guitarrista de Jack, un lujo de concierto, creo que después de esta presentación se ganó un nuevo fanático.
Forto por David James Swanson
Luego de esta presentación me queda muy claro la razón del éxito de Jack White su música, su puesta en escena y una actitud avasalladora son realmente un espectáculo digno de presenciar y absolutamente inolvidable.
Con una implacable batería de éxitos, Pixies fue el plato fuerte de la jornada, cerrando la noche con un set donde desfilaron 22 de sus composiciones sin parar. Centrándose principalmente en su gran y aclamado “Doolittle” (1989), los liderados por Frank Black despacharon himnos como “Here Comes Your Man”, “Hey”, “Crackity Jones”, “Wave Of Mutilation”, entre muchos otros, dando espacio también para su etapa más reciente con “There’s A Moon On”, “All The Saints” o “Human Crime”.
Foto por Bastián Cifuentes Araya
Indudablemente, la agrupación se concentró principalmente en la interpretación, dejando de lado artilugios como el apoyo gráfico en pantalla o incluso la interacción con la audiencia. Pese a esa frialdad en el desplante escénico, el ejercicio del cuarteto se entiende bien al notar la química que el frontman posee junto al guitarrista Joey Santiago y el baterista David Lovering, sus compañeros de toda la vida en el proyecto. Punto aparte para la bajista Paz Lenchantin, quien pese a ser la “recién llegada” (aunque lleve ocho años en la banda), quien a punta de carisma se ha ganado el corazón de los seguidores.
Foto por Paulo Reyes
La dupla de “Where Is My Mind?” y un cover a “Winterlong” * de *Neil Young fueron los tracks encargados de cerrar la noche, demostrando con creces el arrastre que tiene Pixies con la fanaticada chilena. Si contamos el interés mayoritario que había anoche por ver a la agrupación, podríamos decir que se trata del show más grande que han dado en nuestro país, eso sin contar su presencia en festivales como
Maquinaria 2010 o Lollapalooza Chile 2014, donde habían nombres igual o más grandes también en el cartel. Con todo esto sobre la mesa, el quinto show de los oriundos de Boston cumplió a cabalidad lo que se espera musicalmente de una banda que, a estas alturas, es un nombre icónico dentro del rock alternativo contemporáneo.