El documental estrenado el 2018 sigue la activa vida del productor musical más cotizado de la industria, en una narración que intercala su difícil camino al éxito con su influencia en la música que ayudó a moldear el siglo XX.
Por Valentina Tagle Lorca
Traten de pensar en la persona (viva) más famosa que conozcan. Con la excepción de tal vez un par de líderes de estado, es probable que cualquier ser humano que se haya pasado por sus cabezas sea un contacto en el celular de Quincy Jones. Y es que, con casi 70 años de trayectoria, Jones construyó una carrera que lo convirtió en una de las personas más influyentes no solo en la música, sino que en el entretenimiento en general.
En Quincy y, el documental de Netflix dirigido por su hija, la actriz Rashida Jones y Alan Hicks, el músico repasa algunos de los momentos más importantes de su vida y su carrera que lo convirtieron una de las mentes más cotizadas de la industria, desde su dura infancia en Chicago, sus inicios en la música como trompetista, pasando por su amistad y colaboración con artistas de la talla de Ray Charles y Frank Sinatra, hasta su activismo político y humanitario.
El largometraje nos muestra a un hombre que a sus 87 años se mantiene activo en la escena musical. Mientras se intercalan narraciones de su pasado, en el presente se prepara para un momento cúlmine en su carrera: la producción de la apertura del Museo Nacional de Arte y Cultura Afroamericana. Dicha ceremonia contaría con la participación de los más prominentes personajes de la cultura afroamericana actual, invitados personalmente por Jones, entre los que podríamos contar (solo para que se entiendan las proporciones) a Barack y Michelle Obama.
Nos queda claro que Quincy es una leyenda viviente. Basta con nombrar algunos de los trabajos en los que estuvo involucrado para entender la influencia que tuvo en la cultura del siglo XX. Un ejemplo de esto son los álbumes Off the Wall, Thriller y Bad de Michael Jackson, el mega hit "We Are the World", la emotiva película The Color Purple dirigida por Steven Spielberg (donde Jones además de producir compuso la banda sonora) y la popular sitcom The Fresh Prince of Bel-Air (El príncipe del rap).
Como si no fuera obvio, ha sido galardonado con todos los grandes premios de las artes: Emmy, Grammy, Oscar y Tony. Ya sea como compositor, conductor, arreglista o productor, su legado es reverenciado por artistas en todo el mundo. El documental Quincy nos entrega una mirada cercana y personal sobre la vida de un ícono musical, y es una excelente manera de comenzar a familiarizarse con su obra.