Una rendición nostálgica al clásico francés de 1965 que moderniza la emblemática balada.
Como un segundo anticipo sobre lo que será su próximo EP “Libre”, la banda chilena Piedraluz nos sorprende con una su renovada versión del clásico “Aline” de Christophe (1965), en colaboración con Boris Reyes -productor, arreglista, músico y nieto del legendario músico chileno Zalo Reyes-, quienes en total maestría transforman la balada sesentera francesa en una pieza de rock alternativo/pop que fusiona lo vintage con lo contemporáneo.
La banda opta por una restructuración sonora que otorga un giro fresco y único mezclando el sonido característico de Piedraluz con la “balada a la chilena” de Boris Reyes, manteniendo intacta la esencia emocional de la canción original: la pérdida de un ser amado (Aline) arrasada y perdida por el mar. La poderosa interpretación vocal de Consuelo Lillo y el ingenio interpretativo de Boris Reyes destacan en esta adaptación, imprimiendo un dolor palpable que resuena en una base de power rock del bajo y energética batería, ambientada entre guitarras de balada rock y teclados que evocan la época.
Tanto “Aline” como el EP del que forma parte, previsto para lanzarse a fines de 2024, fueron grabados e interpretados en vivo en estudio, lo que aporta una autenticidad palpable a la producción. Este enfoque no solo honra la esencia de la canción original, sino que también revive la técnica de grabación de los años 60’s, donde cada toma se ejecutaba en una única sesión (one-take), lo que permite que la energía y la emoción fluyan de manera orgánica, creando una conexión más profunda entre los músicos y la audiencia, y destacando la destreza interpretativa de Piedraluz y Boris Reyes en cada nota.
La desesperación y la añoranza que expresa la letra de “Aline” conectan con nuevas audiencias, donde las armonías instrumentales refuerzan la narrativa, dejando que la atmósfera rock/pop fluya con naturalidad mientras la banda se mantiene fiel a su identidad sonora. Es una reimaginación que homenajea el pasado sin quedar atrapado en él.
Si eres amante de los clásicos y el rock chileno en ascenso, esta versión de “Aline” es una invitación a viajar por las emociones profundas por tres minutos y medio. Escúchala y sigue a Piedraluz en sus redes para no perderte sus próximos lanzamientos, que prometen seguir sorprendiendo.