“Pavez y Los Inseguros” invitan a un viaje reflexivo y poético sobre un amor adolescente

En su nuevo single titulado “20 años”, primer adelanto del disco “Nada pasa en estas películas” que será publicado en julio próximo.

En estos tiempos de encierro, producto de la pandemia mundial del Coronavirus, la música ofrece no solo una alternativa para relajarnos o divertirnos, sino también una invitación a la reflexión. En ese contexto, Pavez y los Inseguros acaban de publicar su nuevo single titulado “20 años”, canción que de una forma reflexiva y poética aborda un período clave en la vida de las personas, la adolescencia, específicamente el reencuentro de un amor adolescente y su inevitable fin en un mundo muy distinto, ya pasadas dos décadas.

La nueva canción de esta agrupación oriunda de Valparaíso, liderada por Pedro Pavez, vocalista también de la reconocida banda Molo, aunque mantiene la línea del pop y el rock, en esta oportunidad descansa en un ritmo funky, acompañado por la batería de Roberto Lillo, el bajo de Rodrigo Quiroz y las guitarras de Pablo Muñoz, el trío de músicos porteños que dan vida a Los Inseguros.

El material que fue grabado por Pablo Muñoz y Sebastián Valdovinos, de Estudios Fábula, con el trabajo de masterización por parte de Chalo González, mientras que el arte quedó en manos de Jota Ampuero.

Sobre “20 años”, Pedro Pavez expresó que

  • “no nos interesa hablar de los grandes temas, lo que no significa que no tengamos una visión política. Creemos que lo importante se juega en la vida cotidiana, en esas historias que de tan íntimas se convierten en universales, en las cosas chicas que pueden llegar a develar misterios, sin dar muchas explicaciones y que finalmente todo el mundo las vive”.

Cabe mencionar que esta canción es la última del proceso de composición de “Nada pasa en esta películas”, el segundo disco de la banda que verá la luz en julio próximo.

  • “Tenía en mente una cita de Leonard Cohen que dice ‘primero que todo, nada sucederá, y un poco después nada sucederá nuevamente’. Es sobre la destrucción de la nostalgia y la pérdida de la virilidad. Tenía en mente la idea de que fuese una canción que me hubiese gustado bailar en una fiesta en 1995”, concluyó Pavez.