En estos tiempos hay un fuerte anhelo de intimidad en la que es muy fácil tener sexo y contacto físico, pero no se dá la dedicación para crear una relación cercana que nos haga sentir importantes, protegidos y amados. Con esta temática, la cantautora venezolana Laura Guevara presenta “Amar es Dar”, que es el segundo adelando del disco Del Amor y otras Sustancias.
- “Esta canción la compuse soñando con esa conexión profunda que anhelo tener, que ha sido objeto de millones de canciones, de historias de amor, esa necesidad de pertenecer con alguien y de sentirnos profundamente enlazados y protegidos”.
“Amar es Dar” es una reflexión sobre todos los esfuerzos que hacemos cuando conocemos a alguien para no vernos vulnerables y no sentirnos desprotegidos. Hacemos cantidades de estrategias para parecer fuertes, desapegados, no tan interesados o invulnerables. Nos llenamos de disfraces, protecciones y ansiedades para evitar ser lastimados. Todas estas estrategias, la mayor parte de las veces, nos alejan de la conexión real y nos ponen a tener un juego que es deshonesto con nosotros mismos, que nos obliga a desconectarnos con lo que somos, lo que queremos y lo que soñamos. A pesar de todos estos esfuerzos para protegernos, es mucho más fácil desnudarnos y enmascarar ese anhelo de conexión íntima con la conexión física y el sexo.
Esta búsqueda de conexión es parte de la historia del disco Del Amor y otras Sustancias. En este viaje personal que habla sobre la soledad y los anhelos, nos encontraremos con muchas relaciones desconectadas como en “Antes” (el primer adelanto del material), con personas que nos quitan energía y nos llenen de ansiedad, para luego empezar el camino de la introspección, con la construcción de la intimidad personal y del autoconocimiento para así, poder tener un contacto profundo con uno mismo, y por consecuencia, con los demás. La conexión con el exterior siempre comienza con el interior.
“Amar es Dar” evoca las canciones clásicas latinoamericanas, es un bolero que se mezcla con sonidos actuales y con los característicos de su “folk de la ciudad”. Tiene un aura de misterio, sensualidad y profundidad.
Esta canción fue producida por Gustavo Medina, mezclada por Nacho Molino y masterizada por Daniel Ovie.