La artista nacional cerró el 2023 con “Querida Javiera”, un inédito show a la carta que contó con un setlist confeccionado de pies a cabeza por los asistentes del espectáculo. La intérprete de “Cámara Lenta” disfrutó de un íntimo encuentro, el cual reafirmó el inquebrantable lazo que comparte con su leal fanaticada.
Por Fernando Vilches
Foto por Francisco Vera
La construcción de conceptos para citas en vivo por parte de bandas y artistas es sin duda un tema aparte. Las opciones no discriminan en tamaño ni en forma, depende única y exclusivamente de qué tanto se pueden estirar las mentes creativas y sus respectivos bolsillos. Los conciertos a la carta son una propuesta más que interesante, la cual ha recorrido diversos géneros, pero que mantiene su esencia intacta: hacer participar a los fanáticos.
Querida Javiera…
Javiera Mena anunció en agosto del presente año un show con el formato anteriormente mencionado con miras a cerrar un movido 2023. ¿El lugar? El Teatro Coliseo. Uno de los recintos más idóneos - junto al Club Chocolate, si me es posible postular otro santiaguino - para generar una conexión única con los asistentes. Calidez, exclusividad y familiaridad. Bajo el nombre de “Querida Javiera”, - tal como si le estuviésemos pidiendo regalos de navidad - una prometedora antesala se instaló en las cercanías de La Moneda.
A medida que la masiva convocatoria iba ingresando al Teatro Coliseo, las extasiadas ganas de los asistentes por gozar de una jornada especial junto a Javiera Mena, eran más que palpables. Más allá de que se nos presentó un frío día - e inusual por la época -, al interior del recinto el cuento fue otro. El calor reinó de principio a fin al interior del recinto, pero en ningún momento se contempló como un inconveniente para los incansables fanáticos. El repleto que se contempló tanto en las canchas como en las plateas fue fiel reflejo de la completa devoción por cerrar de buena manera el año junto a Javiera Mena.
A eso de las 21:15, la protagonista de esta noche apareció sobre el escenario luciendo un radiante traje negro de dos piezas. Mientras saludaba amablemente a su público, sus compañeros de banda se instalaron en sus respectivos lugares para dar inicio a esta preciada jornada. En cosa de segundos, Javiera se arrojó con decisión hacia los teclados que yacían en el centro y Hasta la verdad se vio como la opción perfecta para dar inicio a esta velada.
El hilo conductor del show comenzó a mostrarse con sutileza. A pesar de comenzar con un tema que fue una invitación irrefutable a bailar, apenas la cantante se sentó a interpretar Casan, se pudo percibir que esto apuntaba a una montaña rusa de emociones. La delicadeza que necesitaba un tema como este fue complementada exquisitamente por la flauta traversa. Un cariñoso abrazo para los oídos de los asistentes.
El insigne debut del 2007 seguiría sonando con Como siempre soñé, canción la cual contó con la primera sorpresa de la noche: Princesa Alba. La cantante se sumó a Javiera para cantar el tema en formato dúo y regalarle un nuevo aire gracias a su desplante vocal.
Rozando la media hora de espectáculo, una canción reciente se hizo paso entre la multitud para animar la jornada. La Isla de Lesbos se encargó de encender los ánimos y una vez el tema finalizó, dos hits golpearon la mesa, sobre todo si hablamos de uno que fue el más demandado - según la misma Javiera - por parte de los asistentes.
Los esquemas de la generación
Cámara Lenta, canción que se encuentra en el ombligo de Esquemas Juveniles, es sin duda una parada obligatoria para cada fanático de Javiera Mena. Con una melodía delicada y una lírica más que fogosa, es probable que cada persona tenga alguna historia especial con este tema y así se pudo percibir. El público se deshizo en gritos mientras las lágrimas corrían con desenfreno y los cánticos eran pronunciados religiosamente. Y si faltaban ojos por estrujar, el solo de saxofón que incluyeron de forma magistral, se encargó de realizar esa labor. Los asistentes estaban triunfando.
Había que seguir afirmándose, porque en cosa de un parpadeo de ojos tuvimos a Gepe compartiendo escena junto a Javiera. ¿El tema? Sol de invierno, otro clásico y esencial dentro del heterogéneo catálogo de la cantante.
La jornada ya era proverbial. Entre lentos y rápidos, se estaba gestando una verdadera comunión entre la fanaticada y el artista. Y es que se pudo ver reflejado con potencia tanto en temas nuevos cómo de antaño. No pareció importar si se trataba de Un audífono tú, un audífono yo o de Me gustas tú, los asistentes estaban ahí para celebrar la carrera de Javiera.
La última elección de la noche fue Al siguiente nivel, el tema que lo inició todo. Una decisión hecha con guantes, la cual se encargó de cerrar un show preciado para los fans y en definitiva, un año excelente para Javiera Mena.
¿Hay una mejor sensación que sentir que el concierto está hecho para ti? Creo con efervescencia que no y es un placer ver como artistas y bandas completas se esmeran en lograr ese cometido. Se trata de conexión e intimidad, de sentir la cercanía del artista con su gente. Los más acérrimos lo agradecemos y más importante aún, lo disfrutamos con el corazón.
Setlist:
- Intro + Hasta la verdad
- Acá entera
- Casan
- Como siempre soñé (con Princesa Alba)
- Dentro de ti
- La Joya
- La Isla de Lesbos
- Cámara Lenta
- Sol de Invierno (con Gepe)
- Me gustas tú
- Del Flúor A
- Supapilapuso
- Un audífono tú, un audífono yo
- Otra era
- Corazón Astral + Sincronía Pegaso
- Yo no te pido la luna
- Luz de piedra de luna
- Esquemas juveniles
- Sufrir
- Espada
- El amanecer
- Al Siguiente Nivel
Galería fotográfica por Francisco Vera
JAVIERA MENA
