La cantante estadounidense selló la tercera jornada del festival con un show de primer nivel. Junto a una temática orientada hacía su último álbum "SOS", la voz de "Kill Bill" se lució sobre el escenario del Cenco Malls Stage, que contó con una puesta en escena privilegiada y un trabajo coreográfico proverbial.
Por Fernando Vilches
Luego de una categórica presentación de Sam Smith en el Banco de Chile Stage - la cual contó con seis cambios de vestuario, un coro góspel y una íntegra propuesta escenográfica - , la última cita que tuvo el público con los escenarios principales recayó en las manos de SZA.
Gracias a una tremenda puesta en escena que privilegió el relato, la cantante apareció sobre el Cenco Malls Stage con un producido juego de pantallas, el cual intentó emular una especie de barco que navegaba por aguas turbulentas. Una temática sumamente concordante con el arte de su último disco, SOS.
SZA comenzó con un pausado y fervoroso ritmo gracias a la sensualidad de "Love Galore" y "Broken Clocks", dos canciones pertenecientes a su segundo álbum, Ctrl.
Sin embargo, cómo si de una montaña rusa se tratase, la artista estadounidense no escatimó en subir y bajar las revoluciones a medida que el set de canciones iba desarrollando su línea narrativa. ¿Con qué lo gestionó? Con producidas coreografías y versátiles instrumentistas - punto aparte para su guitarrista y bajista, quienes sonaron cómo un cañón -. Ambos elementos se transformaron en sus herramientas principales para resolver con destreza el cambio de ritmos.
Así se demostró cuando la cantante pudo pasar de la incombustible "All the Stars" a la candente "Garden (Say it Like That)" sin mayor dificultad.
Uno de los destacados de la presentación llegó cuando SZA se subió a una bola de demolición que la elevó unos metros, recordándonos al icónico videoclip de "Wrecking Ball" de Miley Cyrus.
Cuando el espectáculo encontró sus pausas, la artista interactuó con su público en repetidas ocasiones con un español que tuvo tintes del acento venezolano. Así lo hizo notar cuando introdujo "Nobody Get's Me": "Esta canción es sobre mi novio, mi ex novio".
El cenit de la jornada llegó indiscutiblemente con "Kiss Me More", tema que comparte con la rapera Doja Cat - quién estuvo en Lollapalooza Chile 2022 - y que tuvo un apoteósico desenlace salsero.
Con "Good Days" SZA colocó el broche dorado en lo más alto del Cenco Mall Stage, para así cerrar una tremenda jornada que nos ofreció un amplio abanico de artistas pop y r&b. El debut de SZA quedó, sin lugar a dudas, a la altura de las estrellas.