La espera acabó y estamos emocionadxs de anunciarlo: Can Can está de regreso. Tras el "Ayer/Mañana" y las activaciones digitales, llegamos al final de este viaje análogo-digital con un nuevo lanzamiento: la experiencia de Azul de la Distancia, primer single de la banda desde 2012.
Para Can Can es un regreso nostálgico, decorado con el detalle de lo que significa volver a las canchas en una época tan difusa, pandémica. ¿A dónde se vuelve cuando no se puede volver a tocar en realidad? Enfatizando en la distancia, el nuevo material empezó a tomar forma así, a muchos kms. entre Nueva York y Quito, entre 2015 y 2019, entre la pre-pandemia y la nueva realidad. Una situación que de manera abstracta encontró su primera forma a partir de un texto de Rebeca Solnit, The Blue of Distance, del cual Daniel Pasquel cuenta:
- “Habla de esta idea de una nostalgia implícita que existe en el hecho de que las cosas al estar lejos adquieren una tonalidad azul -como el cielo, las montañas-, un fenómeno físico de estar a muchos metros de X o Y lugar."
Para el reencuentro entre Denisse, Daniel y Andrés entre 2016, empiezan a compaginar sus composiciones, a lo que al regreso definitivo a Quito, de acuerdo narra Denisse,
- “La presencia física siempre le ganará a la tecnología. Cuando nos reencontramos en el estudio en el 2018, todo empezó a tomar forma. Cada canción comenzó a tener su identidad, y en este punto se sumó al equipo Ivis Flies, el cuarto can.”
Con la suma de Ivis (Mateo Kingman, Paola Navarrete) en la co-producción y el tradicional estudio La Increíble Sociedad, se une todo el rompecabezas desde enero de este año, cuando entra Tweety González (Gustavo Cerati, Fito Páez) para mezclar esta y otras producciones sorpresas.
Como continúa Denisse, trabajar con alguien del calibre y renombre de Tweety se vio como un sueño que se tornaba posible con este regreso. La energía combinó y fluyó con nuevas ideas y anécdotas para sazonar, en lo que Daniel agrega que se trata de una gran influencia. Para Tweety la experiencia fue sorpresivamente divina, como explica en su entrevista:
- “Mi experiencia con Can Can no pudo haber sido más agradable, tan sorpresivamente divina, no esperaba pasarla tan bien a todo nivel: humano y musical. Cuando llegué ya estaba todo al 90% maximizado, faltaba ese 10% que podía agregarle yo para llevar las canciones de un 9 a un 10 y creo que lo logramos. Son muy perfeccionistas, muy artesanales, y muy finos y profundos en su música.”
