Después de su elogiado disco Formas, nominada a los Premios Pulsar y con nuevo material por delante, Entrópica sigue buscando no solo la consagración como artista, sino también descubrir todo a lo que como artista puede lograr en la nueva y extraña realidad de la música actual.
Por Nicolás Noli
Sonidos de electrónica, bases y beats de rap, más cercanos a lo urbano y sus orígenes, todo en una voz popera y que se encierra en una propuesta distinta, “rara”, indescifrable y que transita de manera disforme entre cada una de sus canciones. Una entropía, una artista entrópica, eso es Entrópica.
- Ojalá pudiera estar durmiendo y despertar con la idea clara, una inspiración. Pero no tengo eso.
Francisca Bascuñán, su nombre de carnet, la convierte en algo más terrenal. Eso es al fin y al cabo, una persona que se convierte en una artista con otro nombre e identidad. Pero que no posee esas cualidades mágicas que algunos creen. Todo es más simple, en palabras, pero más duro a la hora de llevar a cabo, sobre todo en estos momentos.
- Soy más creyente del trabajo duro, de probar y conocer. Escucho nuevos beats, pruebo cómo suena el teclado, la batería y luego, en último lugar, me concentro en la letra de la canción.
Han pasado ya seis años desde su primer disco. Ese con el cual se independizó de todo lo que le dejaron artistas con quienes trabajó durante su formación, de los cuales pudo sacar todo lo que la ayudó a condensar lo que tenía dentro. Una construcción que pese a nunca buscar algo concreto, si tenía definido un estilo que la muestra como una de las exponentes más innovadoras de la actual escena musical chilena. Rara, como pueden decirle sin incomodarla, distinta sin discusión.
Hace menos de un año sacó su último disco, Formas, y hace unos días se estrenó el video de su canción homónima. Pese a la cercanía de esto, Entrópica ya tiene en mente su próximo trabajo como si no hubiese descanso. Es que como ya lo ha dicho, la música es su psicólogo. Por eso, escucha y escucha de sí misma, aprendiendo no solo a dónde quiere ir y cuándo soltar, sino también, por dónde ha estado.
- Pasaron muchas cosas, ayudándome a componer de mejor manera. Sé explicar lo que me pasa mejor, que la melodía tenga más sentido con la música y hacer una producción sonora más fina. Hay una producción progresiva desde que empecé hasta ahora. Hay más evolución en la producción más que las canciones, porque ellas siguen siendo yo y lo que me pasa.
Dice que cada disco y canción es como “verse a ella en el momento”. Desde “Mi Lugar” o “Mala Onda” hasta “Housie” o “Formas”, hay todo un proceso. Cuenta que cada lanzamiento es también desprenderse de esa parte de ella, de lo que vive y lo que siente. Si no lo hiciera, asegura, todavía estaría trabajando en alguno de sus álbumes. Todas las ideas que le dan línea a uno de sus trabajos, se cierran al momento de su publicación. Por eso su nuevo disco, es algo totalmente distinto.
- Todo lo que estoy haciendo ahora lo comencé una vez que Formas ya se terminó. Por eso esto lo estoy partiendo de cero.
Y obvio, pese a lo inclasificable de su música, su sello sigue. Toda una propuesta que busca la armonía del caos. Quizá por lo mismo las portadas de sus discos siempre son una cara mirando de perfil –dato que le sorprende-, porque al final siempre hay un objetivo. En el caso de Entrópica, es seguir conformando una identidad. No definirla, sino que ir construyéndola.
- Tengo una sola visión. Para mí, el ser no clasificable es mi caballo de batalla y eso debe estar en mi música, lo visual y mi actuación en vivo. Cuando ese objetivo converge en todos los puntos, digo ya, está bien. No creo que todos puedan decirme que mi música está bien, pero sí me hace sentido, ese es el momento.
La distancia y reflexión digital
Luego del lanzamiento de Formas en septiembre del año pasado, Francisca fue nominada como Mejor Artista Pop en los últimos Premios Pulsar. Sin embargo, tanto el estallido social como la crisis por el Covid-19 han cambiado en gran forma el cómo se desenvuelve actualmente la escena musical en Chile y el mundo. Nada de conciertos y todo orientándose al streaming. Aunque para ella, no ha sido algo traumático sino que una oportunidad.
- De esto, pese a ser jodido, lo único que podemos hacer música. Pero terminando vamos a encontrar una nueva manera de cómo mostrar nuestras expresiones.
Asegura, que sin todo esto que sucede hoy en día, no se habría acercado nunca al streaming para ofrecer concierto. Nunca tuvo las herramientas o conocimientos que necesitaba para hacerlo, pero las circunstancias la llevaron a ello con resultados inesperados. Una cercanía impensada, un feedback mayor e íntimo con sus seguidores. Algo que le ha traído desde risas a reflexiones sobre dónde ha estado a lo largo de su carrera y quién ha sido a través de sus letras.
- Ha sido muy divertido. Hay partes de las canciones que ahora sé que a la gente les gusta. A veces me sorprendo que hayan momentos de mis temas que la gente ama y a mí no me gustan jajaja. Me preguntó “¿Por qué les gusta esta canción?” y en general es porque se identifican con ellas. Eso es súper gratificante de saber.*
En lo personal, Francisca tiene sus favoritas como “Nina” y “Maneras”, las que nadie pesca según ella. Mientras todos piden por ejemplo “En Mi Cuerpo”, una canción adolescente de su primer EP que quizá hoy no la refleja tanto, siendo más madura artística y humanamente. Pero, las canciones siempre terminan siendo una fotografía de ese tiempo y por tanto, una lección de cómo perfeccionarte y de los cambios que van ocurriendo y no nos damos cuenta.
Así entre los beats instrumentales del disco The Chronic de Dr. Dre, Entrópica busca otros momentos de los cuales pueda traer del pasado cierta nostalgia. La misma que usó en su más reciente video para la canción “Formas” como fue la presentación de Grace Jones en el mítico programa de Raul Matas, “Vamos a Ver” a principios de los 80’s. La ambientación, los colores beige del público y la época en que eso sucedió, son para ella una inspiración que en momentos como éste, deben seguir recordándose.
- La misión del video era esa. Más que lo propio que significaba Grace Jones, sino lo que se nos permitía expresar o no en ese tiempo. Si llego a encontrar otra escena así, volveré a hacer algo como ese video, pero todavía no lo encuentro.
Insiste en la importancia de aquello. “Ahí se originó todo lo horrible que nos sucede ahora”. Su objetivo dice, es seguir exponiendo aquellos momentos en que con pequeños gestos la gente se opuso a una estructura sombría, incluso con mayor dificultad.
Tiempo de volar
El tiempo en casa lo usa para su nuevo disco y revisar todo el pasado. Sin engolosinarse y mentalizándose en poder soltar las cosas cuando estén listas. De la misma forma, Francisca siente que lo que venga debe ser fuera de Chile. Viajar y aprender de lo que hay afuera, conocer nuevos sonidos y formas de conectarse con la gente.
- Acá en Chile la industria es pequeña, es como jugar a la sillita musical. Y yo no soy buena para sentarme y sacar a otro, en especial en el pop. No quiero eso. Me motiva tocar más afuera.
Ya el 2018 tuvo una gira por Estados Unidos, que la llevó a ciudades como Austin y Nueva York, llegando a tocar en el festival SXSW donde pudo ver cómo otros artistas tenían una presencia única y diferente a todo lo que se puede ver en Chile. Cuando todo esto pase, las fichas van a estar puestas en eso. Como siempre, sin un camino definido, pero con un objetivo claro: la música.