Llegó la hora de comenzar el nuevo viaje de Pop y Madurez. Un trayecto que parece conocido pero que hoy vislumbra un recorrido consciente del melodrama, el amor y nuestro entorno natural.
Canciones cercanas, presentes en su forma más simple y concreta. El quinto disco de estudio de "Coiffeur" ya es una realidad. “Eclipse” vuelve a acercar el pop del músico a la raíz con 10 canciones pensadas para que cualquiera pueda cantarlas y tocarlas en una gama de instrumentos.
Las distintas capas que presenta el sucesor de Conquista de lo Inútil se conjugan en estados que pasan por el romance, la naturaleza y drama.
“Hace tiempo me venía sintiendo atraído por las formas del melodrama, como en las películas de Douglas Sirk”.
Confiesa el argentino con sede en México, apelando a la capacidad de contar historias que pueden sonar banales pero que, en su fondo, develan nuestras obsesiones, nuestra falta.
Tal como un eclipse, que viene a ocultar un objeto para darle forma a otro, el álbum del que ya conocíamos "Aire", “Evidencia”, “Las Consonantes” e “Inmensidad” presenta este juego de lo que se oculta y lo que se muestra: la existencia de dos cuerpos que en su tránsito generan una danza de luces y sombras, dando lugar a una nueva figura u óptica.
“Como diría Bonnie Tyler, un eclipse total del corazón”,
Expone "Coiffeur", que logra encarnar el melodrama en su forma más latina y pop; un ejercicio que lo acercó a todos esos cantantes del pasado que sonaban en el auto de su familia en vacaciones.
“Tengo la sensación de que Eclipse vuelve a transitar la órbita de Primer Corte, pero esta vez desde otra perspectiva. Como si uno fuera haciendo un recorrido en espiral y volviese a pasar por el mismo lugar, pero apreciándolo todo desde otra altura”.