Un acto que a estas alturas es sinónimo de calidad, potencia y buen hard rock. El hombre del sombrero de copa le demostró toda su categoría a un público chileno que cayó rendido a sus pies y disfrutó de uno de los primeros conciertos de alto calibre de la cartelera musical de este año.
Por José Tomás Prado
Foto por Nelson Galaz
El Teatro Caupolicán vio desde temprano cómo fanáticos de todas las edades esperaban pacientemente fuera del recinto para la apertura de puertas de un reencuentro que parecía más que necesario. El vínculo del mítico guitarrista de Guns N´ Roses con nuestro país se ha forjado a base de años de entrañables presentaciones que le han permitido al músico llegar con diferentes propuestas a nuestro país desde 1992, cuando la entonces denominada “banda más peligrosa del mundo” visitó Chile por primera vez.
Sea con su banda madre o no, recibir la visita de un héroe de la guitarra eléctrica siempre es motivo de celebración, y el público que ayer repletó el Teatro Caupolicán lo sabía perfectamente.
Minutos antes de la hora pactada, Gilby Clarke se mostró en escena y recibió el cariñoso aplauso de un público que estaba hambriento de riffs de guitarra. Acompañado de Ej Curse en el bajo y Troy Patrick Farrel en la batería, el hombre que por unos breves 3 años se desempeñó como el guitarrista rítmico de “Guns”, dio el vamos a una jornada que prometía hard rock del bueno. Apoyado en sus colaboraciones con Slash, su trabajo solista y algunos covers (que incluyeron una coreada versión de la clásica “Knocking on Heaven´s Door), el músico dio la dosis perfecta de energía para encender los ánimos de un público que ya llenaba el recinto capitalino.
Dieron las 21:05 y las luces se fueron a negro mientras sonaba de fondo la banda sonora del clásico del terror “The Thing”, generando una tensión que resonó fuerte cuando el sombrero de copa fue divisado por primera vez sobre el escenario. Acompañado de su clásica Gibson Les Paul y una banda que lo ha acompañado hasta el fin del mundo, Slash soltó los primeros acordes de “The River is Rising” y el teatro se vino abajo.
El set basó su grosor en material solista gracias a los temas presentados en “4” (2022), el cuarto disco de Saul Hudson bajo el formato SMKC. Lejos de despistar a quienes llegaron orgullosamente con sus poleras de Guns N’ Roses, la energía en vivo de “Driving Rain” y “Too Far Gone” hicieron saltar a toda la cancha y generaron los primeros coros de la noche. Tras cada tema, Myles Kennedy se encargaba de agradecer el cariño del teatro, incluso hasta dándose el tiempo de firmar uno que otro autógrafo mientras cantaba.
El correr de los temas iban dando el espacio para que Slash hiciera gala de su destreza, con solos de guitarra que se tomaban por completo los focos del recinto capitalino y causaba que todo el público grabara o simplemente se quedara mirando atónito. Al igual que el acto de apertura, el set también tuvo espacio para algunos guiños. “Always On The Run”, originalmente de Lenny Kravitz, demostró la potencia vocal del bajista Todd Kerns mientras Myles tomaba breves descansos durante el transcurso del concierto.
Cerca de las dos horas de presentación, la banda empezaba a cerrar de manera triunfal su presentación tras un breve encore que generó los aplausos de un público que estaba sediento de más. Portando la camiseta de la selección chilena de fútbol, Todd Kerns invitó a Gilby Clarke al escenario para una memorable versión de “Nightrain” que desató la locura total en la cancha.
Los coros invadieron el recinto, que empezaba a decir adiós al ícono del rock al mismo tiempo que este despachaba solos tan desenfrenados que hasta le causaron heridas en sus dedos. La despedida concluyó con la sevillana introducción de Anastasia, la mejor y más exitosa arma de la carrera solista del guitarrista.
Un show que superó nuevamente a visitas anteriores y se encargó de cerrar una gira latinoamericana de la mejor manera posible, con un Slash dando lo mejor de sí pese a su poca comunicación con el público. Así SMKC firmaba otra triunfal visita a nuestro país, y el hombre del sombrero de copa era despedido con una bandera chilena con un claro emblema: leyenda.
Setlist Gilby Clarke
- Monkey Chow
(Slash’s Snakepit) - Under the Gun
- The Gospel Truth
- Cure Me... or Kill Me...
- Knockin' on Heaven's Door
(Bob Dylan cover) - Dead Flowers
(The Rolling Stones cover) - Tijuana Jail
(con “My Michelle” de intro)
Setlist Slash feat Myles Kennedy & The Conspirators
- The River Is Rising
- Driving Rain
- Halo
- Too Far Gone
- Back From Cali
(Slash) - Whatever Gets You By
- C'est la vie
- Actions Speak Louder Than Words
- Always on the Run
(Lenny Kravitz cover) - We're All Gonna Die
(Slash) - Bent to Fly
- Spirit Love
- Speed Parade
(Slash’s Snakepit cover) - Don't Damn Me
(Guns N’ Roses cover) - Starlight
(Slash) - Wicked Stone
- April Fool
- Fill My World
- Doctor Alibi
(Slash song) - You're a Lie
- World on Fire
Encore:
- Nightrain
(Guns N’ Roses cover) (con Gilby Clarke) - Anastasia
Galería fotográfica por Nelson Galaz
GILBY CLARKE
SLASH FT MYLES KENNEDY & THE CONSPIRATORS
