Pueblo Nuevo Netlabel se complace en presentar "Bilocación EP", del músico electrónico, dj y promotor chileno Daniel Klauser.
Bilocación: Espectros de Marx
Las búsquedas encuentran su lugar, los medios sus formas, el ritmo su equilibrio. “Bilocación”, del músico, productor, dj y gestor cultural, Daniel Klauser, es baile, trance y manifiesto; un EP que abre nuevas sonoridades dentro de un registro que ha ido en diferentes direcciones: techno, house, hip hop, jazz o rock latinoamericano son parte de las continuas búsquedas de este músico que se ha abierto paso armando y desarmando estéticas, discursos, sonidos y escenas para, en este nuevo trabajo, invocar a los fantasmas de lo que alguna vez fue, no la música, sino los discursos subterráneos que alguna vez la habitaron.
Teniendo como invitado al músico Tristán Sotomayor (AOI y Nonlocal Society), “Ft Tristán” es un track que nos hace preguntarnos, ¿en qué momento llegamos a este lugar? A través de mínimos medios y un sonido lo-fi como arma discursiva, Klauser nos moviliza, imperceptiblemente, de una estancia a otra, de un paisaje a otro, de una atmósfera a otra; de la crudeza del sonido a almidonados pasajes grooveros de ritmos, casi tribales, que arman o más bien se derriten en un cauce lisérgico, cálido, suave y envolvente.
“Trumpet Lesson” son imágenes sacadas del sueño de una trompeta que viaja por las partículas ácidas escupidas por Miles Davis; o bien podría ser un viaje alucinógeno en medio de la árida carretera de Kerouac, o una oscura y distópica alucinación de Burroughs, o, quizás, se levanta como la intensidad cósmica y sicodélica de Herbie Hancock en Sextant; lo cierto es que acá, la trompeta procesada de Klauser, entrega algo retrofuturista, acompañada de arpegios y bajos que nos devuelven a un baile tribal biológico y alucinatorio.
La voz de Daniel Klauser en “Yo te quise” entrega un nota adicional a este trabajo que, como un laboratorio de ideas, soportes y medios, nos invita a sumergirnos en un sinuoso movimiento, que nos recuerda que lo que escuchamos no es un baile, sino una ceremonia y que ahí, en esa zona media, en el “entre” del “yo te quiero” y “yo te quise” existe también una frontera -zona abisal- entre lo real e irreal o entre la superficie y lo hondo.
“De tu mirada” es el cierre a este manifiesto de fantasmas, de retromanias, referencias, estéticas y discursos, donde el espacio sonoro se convierte en contenedor de múltiples intensidades que parecen deslizarse entre polos, extremos y zonas medias que nos sumergen y hacen emerger entre suaves susurros, que humedecen la escucha, haciéndola ácida y fractal.
“Bilocación” es la aparición sobrenatural de los sonidos que, reunidos en esta ceremonia, celebran la llegada de los espectros que transitan y rompen con aquella censura, prohibición y estigma que ha creado la industria sobre la música subterránea, marginal, prístina y consecuente.